“Me siento solo…”, “Nadie me comprende…”, “¿Seré homosexual…?”, “No encuentro pareja…”, “No controlo mi ansiedad…”, “Cualquier cosa me desborda…”, “No consigo dormir bien…”, “No sé decir No…”, “No puedo parar de comer…”, “Soy muy insegura…”, “Tengo miedo a la muerte…”, “No tengo ilusión por nada…”, “No me gusta mi cuerpo…”, “Tengo pensamientos raros…”, “No me olvido de mi ex pareja…”, “No sé relacionarme con los demás…”,”Estoy echa un lío, ya no puedo más…”, “¿Seré hipocondriaco…?”, “Mi cabeza no para de pensar….”, “¿Y yo quien soy…?”, “No puedo estarme quieta…”, “No puedo superar la muerte de mi mujer”….
Cualquiera de estos puede ser alguno de tus motivos de consulta, aunque existen tanto como seas capaz de imaginar, y varían en su intensidad y en sus diferentes modos de expresión. Sin embargo, cada uno de ellos tiene su propio tratamiento.
Tienes tu propia trama para vivir, tu historia personal y tu mundo interno, con tus ventajas y desventajas para afrontar la vida. Trama son tus pensamientos acerca de la realidad y la de los otros, sobre esta trama se sostiene tu comportamiento. Eres el resultado de tus experiencias y del entorno en que te has movido desde tu nacimiento hasta el día de hoy. Es posible modificarla y empezar a sentirte mejor contigo mismo. Tu eres el escritor de tu novela vida.
Un motivo de consulta define en pocas palabras tus sufrimientos y dificultades para llevar una vida satisfactoria en el trabajo, en las relaciones con los otros y contigo mismo, en tu sexualidad, etc… De los que puedo deducir qué ha fallado en el camino de tu desarrollo psíquico. En los encuentros terapéuticos podremos observar como detrás de estos titulares de motivos de consulta se esconden otros conflictos que tenemos que ir abordando, pues son estos otros los que hay que resolver para tu bienestar. Juntos seremos capaces de llegar allí donde se instala tu emoción, para desde allí encontrar la adaptación a la vida. Por eso, insisto cada terapia es UNICA porque cada uno es UNICO. Todos sufrimos en la vida por distintas circunstancias, el problema es cuando este sufrimiento hace que no seas capaz de adaptarte, y te quedes bloqueado o no avances en la vida, ahí es cuando puedes pensar en pedirme ayuda para juntos resolver esta situación que te impide disfrutar y estar satisfecho.
El sentirte comprendido por mi significa que puedas organizar tu trama de una manera más favorable para ti. Solo podrás comprender, mejorar y potenciar aquellos rasgos y comportamientos, que seas capaz de verbalizar y comunicarme, ya que al ser una persona objetiva en tu vida mi único fin será tu mejoría. Así es como se realizan los cambios mentales, pues al haberte comprendido a ti mismo, al haberme comunicado, observarás como tus pautas de inmadurez o fragilidades se transforman en madurez y fortaleza.
Al escucharte encuentro en tus palabras y mensajes, tanto verbales como no verbales la Solución que en estos momentos tú no puedes ver. La solución al conflicto siempre está en ti.
El tratamiento psicoterapéutico se basa en ayudarte en aquellos sufrimientos e incapacidades que pienses y sientas que tus propios recursos son insuficientes para ellos. Pero aclarando que tú tienes que llegar a ser tú mismo, no llegar a ser como cualquier otra persona.
La psicoterapia es el arte de sustituir una realidad que ya no es adaptada para ti, por otra realidad que se adapte mejor en tu día a día.
Como decía Víctor Frankl, “cuando creas que nada puedes cambiar, recuerda que puedes cambiarte a ti mismo”.
